El cartógrafo tiene voluntad de diseñar mapas partiendo de la observación de realidades diversas atestiguadas por relatos, imágenes, citas… ¿A partir de qué realidades se ha partido para la elaboración de este mapa concreto? ¿O es una irrealidad?
Louise Bourgeois tiene un trabajo que se titula “I do, I uno, I redo” que tiene que ver con la destrucción como parte indispensable de cualquier trabajo de creación. Es un trabajo que me ha influido mucho en muchos niveles, desde la primera vez que lo ví, fue una revelación. Algo similar a un ready-made pero añadiendo un nivel de destrucción del objeto, para construir un nuevo significado. El mundo presente en este trabajo parte de la descomposición y la recomposición, la misma idea de Louise Bourgeois. A partir de un objeto encontrado –que también pertenece a un mundo anterior, o por lo menos a una cronología y por tanto cartografía anterior a donde nos encontramos ahora mismo– Gabriel intervino este objeto, que era un Atlas geográfico, recortando trozos de mapas que a él le gustaban particularmente por una serie de requisitos varios: color, tamaño, fronteras, composición… Esto, y al ir superponiéndose las páginas del Atlas, creó un Atlas paralelo hecho de ausencias de trozos de mapa, o de superposiciones de mapas que no hablaban un mismo idioma. El trabajo de Gabriel se basó en trabajar con utilizar esos trozos de mapas recortados, y el mío en trabajar con la ausencia misma de esos territorios.
Esto es una pregunta raruna e igual me has respondido en la anterior, pero al hombre le encanta trazar caminos y sustraer de ellos cierto equilibrio, pero también se siente instintivamente atraído por el azar y el caos (Dostoievski dixit), esto viene a cuento de la anarquía que se observa en Pre-Antipodarium, ¿hay una voluntad de transmitir un poco de desconcierto?
Es muy interesante el binomio orden-desorden / camino-campo abierto… creo que es un dicotomía inherente al hombre mismo, como algo que te retiene y algo que te libera. Por supuesto el mundo de Pre-Antipodarium se basa en crear una confusión entre mundos –o sus representaciones gráficas, mejor dicho– que no hablan el mismo idioma, lo que crea ese desconcierto. Pero, y aquí viene la novedad, es que al traspasarlos a otro lenguaje gráfico como es la risografía –que no tiene una base tan real como puede ser un mapa de un Atlas– se pierde esa confusión, ya que además, los trozos recortados por Gabriel no son tan grandes. Lo bonito es que si alguien mira por primera vez ese mapa no se dará cuenta que es un mapa frankensteniano, y es quizá gracias a la técnica de impresión utilizada, que nos aleja de un modelo de impresión que conocemos y que consideramos que cumple una función de representación fiel de la realidad…
Es un proyecto concebido a partir del trabajo de Gabriel García Hernández, ¿de qué manera os habéis enriquecido uno a otro?
Gabriel y yo nos conocimos en una exposición y teníamos mucho interés cada uno por el trabajo del otro. Le invité a realizar una micro-residencia en Sandwich Mixto (un programa abierto a cualquier tipo de creador, que quiera hacer un proyecto con algún interés tangencial con nosotros) y poco a poco fuimos viendo que el mundo de la cartografía nos encantaba a ambos. El anterior trabajo de Gabriel “Anticiclón” sentó las bases para que yo le hiciera preguntas sobre esos trozos de mapa que estaban ahí, de donde habían salido, cuál era la intención del recorte… fue una experiencia preciosa porque conectamos muy bien, trabajamos durante un mes juntos sin descanso y salieron miles de cosas que dan pie a ser semilla de una continuación del trabajo… fue un lujazo poder coger algunos elementos de su trabajo, ya de por si tan elocuentes, para empezar yo a trabajar desde ahí. ¡Y para empezar ambos a trabajar desde ahí! Eso será Antipodarium.
¿Pre-Antipodarium se ha hecho concretamente para Sandwich Club o es un proyecto pensado para una continuación? ¿Habrá una serie de cartografías risografiadas que trasciendan el espacio digital?
Pre- Antipodarium es una parte de mi trabajo con Gabriel, y un aperitivo de lo que será Antipodarium… pero una parte que ha sido exclusiva para el club, es decir: habrá cosas parecidas en Antipodarium –seguimos las mismas reglas, el mismo concepto, casi el mismo proyecto– pero no esta pieza exactamente. Y sí: habrá más de una pieza risografiada para Antipodarium… y no digo más para dejaros con la emoción jaja
¿Ha sido una pieza complicada de preparar específicamente para risografía o me lo parece a mí…?
Pufff. ¡Ha sido toda una cruzada! Ya sabes que la risografía funciona como si fuera una serigrafía, es decir, imprime cada color por separado. Esto implica que hay que preparar una pieza digital para cada color… y pensar en opacidades de color que se mezclan cuando hay un color compuesto, como es el verde en esta pieza. Luego además, hubo que dibujar elemento a elemento toooodo el mapa: cada línea, cada flecha, cada patrón. Se escaneó y luego se redibujó en vectorial. Fue bastante trabajo de chinos, cerraba los ojos y veía flechas por todas partes… jaja Luego el tema del color es importante, porque quería que fuera similar al utilizado en el Atlas de Gabriel, que tiene esos colores lavados que a ambos nos gustan tanto, con lo cual fue bastante prueba y error hasta que dí con el que estaba perfecto. Un trabajo de chinos, como se suele decir… pero una delicia. ¡No sé si estoy loca, pero toda mi parte en Antipodarium la he hecho de la misma manera! 😉
Sigo con la tradición de la autopregunta 🙂
“Si hubieras sabido que te iba a hacer estas preguntas, ¿te habrías hecho una autoentrevista?” Seguro. Raquelita, ¡qué nivel de preguntas, maja! Espero estar a la altura